lunes, 30 de julio de 2012

LA RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIAL Y LA ADMINISTRACIÓN DE PROYECTOS EN AMÉRICA LATINA


La cultura latinoamericana es conocida por su festividad, su música y sus bailes, así como su gastronomía rica en frutas y vegetales de gran sabor que reflejan el maravilloso clima que caracteriza a los países que la conforman. Los latinos, nos caracterizamos por nuestra amabilidad y comprensión hacia el prójimo, así como la manera pasiva y positiva al enfrentar los problemas, ya sea mediante el aferro a la fe -que tanto vivimos- o simplemente porque somos “tranquilos”, de ahí que Costa Rica se haya catalogado como el país más feliz del mundo. Nadie se preocupa.

Estas características se convierten al mismo tiempo, en nuestras diferencias con otras culturas, la cultura asiática por ejemplo, quienes se caracterizan por ser trabajadores, perseverantes, organizados e innovadores, donde las leyes en su mayoría se respetan y funcionan como el marco o guía para el país.  Es de esperar que sean una fuente de inventos tecnológicos debido a su perseverancia y de prácticas como “5S”, metodología creada en Japón para reducir los accidentes laborales, mejorar el ambiente de trabajo y elevar los rendimientos del personal, con la práctica de acciones sencillas: clasificar, ordenar, limpiar, normalizar y mantener la disciplina.

Sin embargo, cualquiera que sean las costumbres de una población, la administración de proyectos deberá estar presente a fin de obtener los mejores resultados, ya sea de manera individual o en un grupo donde se deba unir el esfuerzo de varias personas para alcanzar el objetivo común. Tal es el caso de las culturas indígenas como lo son la cultura azteca  y la cultura maya, reconocidas por sus estructuras organizacionales y políticas, así como económicas bien definidos, con comercios y ejércitos que servían para dar orden al pueblo. Planteaban también, el respeto a su entorno, al medio ambiente y sus recursos, dejando claro, que las acciones de un individuo u organización afectan de manera directa el entorno y el bien común.  

Es aquí donde aparece el término de responsabilidad social empresarial en la administración de proyectos. Cualquier empresa forma parte de un sistema, sea económico, social o político, y sus acciones van a repercutir en ellos, por lo que debemos ser responsables y no obviar los problemas, sino más bien, ser entes activos del cambio. La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) se refiere al conjunto de acciones que buscan el mejoramiento social y ambiental, que toman las empresas a partir de las actividades que realizan.

En América Latina, la Red Forum Empresa es una organización sin fines de lucro que buscar difundir la RSE en el continente e incluye un total de 3, 400 (tres mil cuatrocientas) empresas en América Latina. Mediante encuestas, realiza una evaluación del estado de la RSE en el área y describe las percepciones de las partes afectadas: empresas y consumidores.  Para el año 2011, el estudio se centralizó en cinco áreas: toma de decisiones y transparencia, relaciones con la comunidad, medio ambiente, consumidores o usuarios y relaciones con los trabajadores. Como resultado, se marcó la diferencia entre las empresas y los usuarios, donde los primeros consideran tener un nivel de RSE de 73%, mientras que los segundos de 54%. En cuanto a las áreas mencionadas, aquella mejor calificada es la “relación con los trabajadores” con un 56%, mientras que la menor se refiere al área de “medio ambiente” con un 50%. Estos resultados nos muestran el largo camino que queda por recorrer. A ello, se une el hecho de que estamos en una crisis económica en la región, donde los países toman préstamos para pagar préstamos, y donde la competitividad aumenta diariamente, donde todas las empresas realizan esfuerzos diarios para reducir sus gastos y aumentar utilidades, por lo que exigir al mercado ofrecer un producto a bajo costo y al mismo tiempo sea amigable y responsable con el ambiente se convierte un reto.

Por tanto, como futuros administradores de proyecto, tenemos la obligación de atender aquellas necesidades y eliminar aquellos obstáculos que prohíben e inhiben el crecimiento de la RSE en la región. ¿Cómo? Al crear sistemas de medición del daño efectivos que permitan medir el impacto de las acciones operativas, diseñar estrategias enfocadas no sólo al crecimiento comercial, sino también a las prácticas de mejora social, adoptando misiones y visiones empresarial con enfoques responsables socialmente.

En un área donde el turismo se ha convertido en la principal actividad económica, se debe promover programas de preservación y cuido del medio ambiente en las empresas, y cada proyecto deberá cumplir no sólo con lo solicitado en la legislación, sino que deberán los administradores de proyecto mantener una buena comunicación con los involucrados, como lo son los organismos gubernamentales y grupos ambientales, para en conjunto encontrar no sólo la mejor solución al problema, sino aquella además de solucionar, beneficie a más personas.

Asimismo, nuestra región se caracteriza por tener altos índices de pobreza, por lo que las labores de filantropía deberían aumentar diariamente. Programas de educación, alimentación y ayuda a zonas de bajos recursos deberían ser parte de la estrategia comercial de las empresas y no ser consideradas como gastos “extras” dentro de los proyectos. Unido a esto, la formación de líderes, que permitan al ciudadano volver a creer en el sistema político y retomar la transparencia en el accionar gubernamental, que tanto ha caído en la última década, donde todos los días en las noticias se observan casos de corrupción.

Muchas empresas y gobiernos ya han hecho y han tomado acciones para implantar en América Latina el tema de Responsabilidad Social Empresarial, sin embargo, falta mucho camino por recorrer, y será nuestra responsabilidad como consumidores, empleados y guías en proyectos, lograr la unión entre las necesidades que satisfaga una empresa por medio de sus servicios y las necesidades sociales que podría estar capacitada para solventar y así, con una buena gestión de recursos, alcanzar los máximos beneficios para lograr una armonía común.

Páginas web consultadas:
·         “El estado de la Responsabilidad Social en América Latina 2011”. Red Forum Empresa.
Dirección web:  http://www.empresa.org/sitio2009/documentos/ppt_2011/ppt_lanzamientoRSE2011.pdf

·         Las brechas de la RSE en América Latina”. RSE Online.
 Dirección web: http://rseonline.com.ar/2012/04/brechas-rse-america-latina/

·         “Responsabilidad Social Corporativa”. Wikipedia.
Dirección web: http://es.wikipedia.org/wiki/Responsabilidad_social_corporativa

lunes, 20 de febrero de 2012

RETOS EN LA GESTIÓN DE EQUIPOS VIRTUALES


¿Què es la gestión de equipos de trabajo virtuales?
Según la guía PMBOK, un equipo virtual es "un grupo de personas con un objetivo común quienes cumplirán sus funciones y en donde las reuniones de trabajo en persona serán pocas o inexistentes”.  Como se explica más adelante, esta definición puede ser ampliada a “un grupo de personas con un objetivo común quienes cumplirán sus funciones y en donde las reuniones de trabajo en persona serán pocas o inexistentes sin importar el espacio o el tiempo utilizando herramientas tecnológicas para ello”. 

Ventajas del equipo virtual
Como una de las principales ventajas, se tiene la diversidad de los involucrados al proyecto.  Al eliminar la barrera de localización, se puede contar con personal de diversas partes del mundo que cuenten con las características deseables para el proyecto y brinden el conocimiento que poseen.

Desventajas del equipo virtual
La principal desventaja en este equipo es la eliminación de la interacción diaria que viven los involucrados al encontrarse todos en la misma infraestructura. Esto lleva a problemas como la reducción del sentido de pertenencia del equipo al ser mayor el individualismo de los miembros, se pierden oportunidades de aprendizaje o retroalimentación para el resto de los involucrados y todo ello requiere mayor disponibilidad y dedicación de tiempo del gerente de proyecto para poder ejercer un control sobre todos los que forman su equipo.

Retos para el Director de Proyecto
Actualmente existe una brecha generacional en el mercado de trabajo, ya que hoy en día los jóvenes se desenvuelven fácilmente ante el uso de herramientas informáticas, lo que ha facilitado las labores y por ende crea profesionales menos teóricos, mientras que por el otro lado se tiene profesionales de mayores edades que poseen la experiencia, manejo de la teoría y el conocimiento, pero no son diestros en el uso de facilidades digitales.

Otra de los retos será la igualdad en equipos, infraestructura y herramientas con las que contará el grupo de trabajo. Será necesario brindar o apoyar a aquellos que no cuenten con elementos básicos como una buena calidad de internet para videoconferencias, compatibilidades en software y otros, que faciliten y complementen las labores de todos.

Muy importante en este tipo de equipos será la confianza. Al reducirse el contacto entre los miembros como las reuniones de almuerzos, compartir cafés o conversaciones en el pasillo, hace que la confianza entre el personal se reduzca, por lo que el director de proyectos deberá utilizar técnicas de trabajo en equipo para reducir esta separación entre los involucrados.

El más importante de todos los retos para el gerente de proyecto será el control de su equipo de trabajo. Al no estar ubicados en una misma locación, no le será posible verificar quién se encuentra realizando efectivamente sus labores, sino que tendrá como dilema, hacer que el equipo funcione por medio de correos electrónicos, llamadas y otros.  

Conclusiones
·           Los equipos virtuales permiten una mayor diversidad en los miembros, lo que brinda decisiones más integrales al involucrar diferentes personas con diferentes puntos de vista.
·           Si se logran alcanzar los objetivos de cumplimiento de entregables, así como la comunicación entre los involucrados, se obtienen mejoras en el cronograma del proyecto y reducciones en gastos como transporte, reuniones u otros.
·           Las herramientas tecnológicas son clave fundamental para alcanzar el éxito en los equipos virtuales. Se deberá gestionar una educación en todos los miembros, de las herramientas a utilizarse, así como el establecimiento de esquemas o plantillas que faciliten la comunicación entre las partes.
·           Los problemas que se presentan en equipos virtuales difieren pocos de los que se presentan en equipos presenciales, por ello, la resolución de éstos dependerá principalmente de las habilidades que cuente el director de proyecto en el manejo del recurso humano.

·           La utilización de esta modalidad de trabajo deberá estar acompañada de una minuciosa selección de aquellos que formen el equipo, ya que deberán cumplir con estrictos requisitos de responsabilidad y disponibilidad de tiempo para lograr el acuerdo común entre los involucrados.
·           Antes de designar las labores, el director de proyecto deberá estudiar cada uno de los miembros, lo que incluye las herramientas que posea éste, ya que debe garantizar igualdad de condiciones entre los miembros para facilitar la comunicación entre las partes.
·           Es recomendable poseer dentro de la gestión de estos equipos, un plan en caso de eventualidades con las herramientas utilizadas, como falla en las redes de internet, en el equipo o software de trabajo, fallas en correos electrónicos u otros.

lunes, 13 de febrero de 2012

Comparación de capítulo No. 9: PMBok vs Lledó


El libro del autor Pablo Lledó claramente tiene como base la guía elaborada por el Project Management Institute o PMI, la guía PMBok, que quizás es aquella más usada en el área de administración de proyectos.

A manera general, se observa que el libro del señor Lledó es más un resumen, por lo que el detalle de los temas es más superficial que el PMBok, que por el contrario, ahonda los temas y utiliza una metodología más esquemática mediante la utilización de “entradas”, “herramientas” y “salidas” y presenta resúmenes de tipo esquema o diagrama conceptual como lo son las figuras Nos. 9-1 y 9-2 de dicho libro.

Específicamente, para cada proceso se tiene lo siguiente:

1.     Desarrollar el plan de recursos humanos.

En el caso del autor Lledó, hace mención de los mismos temas del PMBok, sin embargo no hace clasificaciones en cuanto a activos de proceso, factores ambientales o recursos de la actividad. Lo mismo sucede con las herramientas, ya que la guía detalla los diferentes tipos de diagramas y organigramas, no así Lledó. No obstante, sí menciona desventajas como en el caso de matriz RACI al apuntar que no indica cuándo debe realizar la actividad cada persona.

Es de recalcar que el señor Lledó explica los tipos de poder y hace mención de experiencia, tal es el caso de el reconocimiento del director de proyecto por los logros y no por la tarjeta personal del puesto.

2.     Adquirir el equipo de proyecto

Ambos textos concuerdan con la información necesaria inicial para realizar el proceso, a pesar de que el autor Lledó no realiza diferencia alguna entre los factores ambientales y activos de procesos de la organización sino más bien los unifica. La guía PMBok al hacer esta separación, detalla la función de cada uno de estas “entradas”.

Como manera de introducir en el proceso, la guía PMBok enlista tres factores a tomarse en cuenta en el proceso, a saber: negociación con eficacia, el resultado de no adquirir los recursos necesarios y disponibilidad de los mismos. Esto permite una visión más integral de lo que se espera obtener del proceso.

3.     Desarrollar el equipo de proyecto

La guía PMBok en este proceso, ubica al director de proyecto en el mercado a laborar, lo que le brinda una visión global del proceso. Asimismo, menciona cuáles son los objetivos que se buscan alcanzar  y recalca la importancia de una comunicación eficaz en este proceso que se desarrolla de manera continua en la vida del proyecto.

El autor Lledó incluye dos habilidades blandas del director de proyecto: liderazgo y motivación. Estos valores le sirven como herramienta para el desarrollo del equipo de proyecto, los cuales expone muy detalladamente, aún más que el proceso mismo. Explica los tipos de liderazgo y teorías y al igual que en los procesos, utiliza recuadros para acentuar una frase o mensaje.

4.     Dirigir el equipo de proyecto

Es en este proceso donde quizá más se observan diferencias en la descripción del proceso. Primeramente, el autor Lledó no incluye como información inicial o necesaria, los activos de procesos organizacionales que el PMBok menciona, algunos como: certificados de reconocimiento, bonificaciones y otros.

En el caso de la herramienta de la gestión de conflictos, la guía PMBok presenta técnicas de resolución de conflictos, no así Lledó, quien utiliza ejemplos de preguntas utilizadas en la resolución sin especificar la técnica. Asimismo, Lledó compara la teoría de negociación clásica y la nueva, al mismo tiempo que presenta 5 (cinco) pasos para la resolución de conflictos.

Como se observa, existen diferencias entre lo expuesto en el capítulo No. 9 del libro “Director Profesional de Proyectos” de Pablo Lledó y la guía “A Guide to the Project Management Body of Knowledge” del PMI, donde se observa principalmente que la primera corresponde a un resumen de la segunda.

Es por esta razón, que la utilización del libro de Pablo Lledó es a razón de esquema o repaso para el lector, después de haber estudiado la guía desarrollada por el PMI.

Sin embargo, como es de conocimiento para todos los involucrados o relacionados al área de proyectos, el manejo de la información le facilitará las tareas que deba realizar el gerente de proyecto. No obstante, el éxito del mismo dependerá en gran medida de cómo el gerente utilice dicha información para alcanzar el objetivo planteado.